sábado, 18 de diciembre de 2010

Capitulo 2.6

-Lai… Es que, con respecto a eso… Tenemos un problema…


Claro que sí, ese era Jonathan. No diría nada sin dar rodeos. Este era un gran defecto, uno de los poquísimos que tenía.

-Sorpréndeme

-Bueno, es que… no me acuerdo

-¿De que no te acurdas? ¿Del problema?

-No, no. Ese es el problema… Es que no me acuerdo de nada desde que…

-¿Desde que…?

-Pues, más o menos… lo último que recuerdo es… cuando estábamos en el aeropuerto. Cuando te…

-Venga Jonathan, puedes acabar la frase. ¿Cuando me atacaste?

-Bueno, -sonaba ofendido- yo le hubiera llamado besarte, pero si te sentiste atacada… aunque creo que tú no opusiste resis…

-Espera, espera, espera, -Le corté. No lo entendía. Si eso era lo último que recordaba, ¿Por qué estaba en mi casa? ¿Qué hacia ahí antes que yo?- ¿No te acuerdas de lo que pasó después del beso?

-Mmm… no… ¿Qué pasó? Laia, ¿te pegué?- sonaba cada vez más y más nervioso- Joder Laia, ¡no me acuerdo! ¿Qué pasó?

-Esto…- ¿Cómo empezar? No se acordaba de nada- No tiene importancia…

Supongo que me delató mi maravillosa cualidad de no saber mentir. Casi sentía cómo rebuscaba en mi cerebro para ver qué había pasado, no podía bloquearlo. No podía ocultarle nada. Pero igual…

-¡Pero igual!- Me tapé los ojos con las manos como si eso fuera a evitar que estuviera en mi cabeza- Igual no es lo mejor que te lo muestre yo. Igual yo… Por lo que siento por ti… Igual lo he exagerado, no sé.

-Pero si yo te he hecho daño a ti, me interesa cómo lo hayas visto tú, no lo que otro cree que he hecho.

-No quiero. No quiero que lo veas de mi. Yo… salí de mí, lo vi todo desde fuera.

-Y si no… ¿Cómo me voy a enterar de lo que te hice?

El silencio llenó la habitación. Yo le miraba a los ojos, sus profundos ojos verdes que casi me pedían por favor que le dejara entrar en mi cabeza.

-Vale… Pero no te enfades.

-¿Con quién?


-Contigo… Por favor.

Lo volví a sentir cómo se metía en mi cabeza. Noté, también, que nunca antes me había dado cuenta cuando Jonathan me leía la mente. Miré a mi alrededor mientras él lo veía todo. Ya era de noche, la luz de la habitación estaba encendida. Miré a Jonathan y volví a quedarme a cuadros. Su reflejó, estaba en la ventana detrás de él. ¡Ahí estaba otra vez!

-Jonathan… tu reflejo…

-No sé dónde está Laia- su voz sonaba ahogada, habría llegado a la peor parte.

-Detrás de ti

Me miró con cara de interrogante y miró a la ventana. Se acercó a ella y tocó su reflejo. Yo lo veía normal, un reflejo como otro cualquiera, pero él…

-¡Laia vete!

-¿Qué?

-¡VETE!

Salí de la habitación y oí cómo Jonathan cerraba la puerta detrás de mí. Estaba asustada. Bajé al salón. Una voz en mi cabeza me gritó “Más lejos”, pero la ignoré. “Aléjate de mí”. Lo oía, pero no quería. No quería dejar a Jonathan otra vez. Vale que no me había esforzado mucho buscándole, pero realmente lo necesitaba. Dejándolo solo causaría más problemas, sobre todo para mí.

Lo mejor que se me ocurrió fue meterme en el baño. El único sitio con pestillo. No me pareció mucho mejor que huir, pero por lo menos no le dejaba. Oí un golpe cuando se abrió la puerta de la habitación.

-¡Laia! ¿Dónde estás?- no sonaba a Jonathan-Sé que estás ahí… Venga sal, que estoy bien.

Me estaba asustando cada vez más. No era él, lo sabía, pero aún así…

-Venga Laia, lo siento. Te juro que no me acordaba.

<< No es él Laia, no es él >>No podía parar de pensar eso…

Jonathan le dio tal golpe a la puerta del baño que del susto me metí en la bañera. Una reacción estúpida realmente, lo sé. Pero era algo que hacía desde pequeña.

-¡LAIA! ¡Sal de ahí! Pero que haces tú aquí Willi…

Dejé de oír a Jonathan. Algo iba peor que mal. ¿Willi? ¿William? ¿Qué hacia William en mi casa? ¿Cómo había entrado?

2 comentarios:

  1. Joooooooooooo te odio!! (no) es verdad que es cortito Y_Y y encima lo dejas en una parte hija... jooo
    pero bueno ciñamonos a los hechos para cometarlos... me gusta mucho que jonathan insita tanto en entrar en la mente de Laia aunque es raro que olvide esas cosas, el pobre tiene un problema deberia medicarse eso! por cierto me encanta esto:
    Vale… Pero no te enfades.

    -¿Con quién?


    -Contigo… Por favor.
    mola!!
    Luego puedo suponer que el reflejo de Jonathan era en realidad su gemelo? o quizas su propio reflejo con vida? o quizas la masa ha adoptado la forma de Jonathan? o quiza el propio personaje sea bipolar y cambie de personalidad?
    creo que he dicho todas las hipotesis posibles a ver como te las apañas ahora para que no encaje con ninguna de estas!!! JÁ! ¬¬
    no jajaja seguro que ya lo tienes pensado y no he dado ni una cierto? xDD
    Pd: en mi postdata de hoy aprovecharé para dar el tiempo de mañana (no me preguntes por qué en mis postdaas aprovecho para no decir nada coherente!): sentiremos un frío impepinable, olerá a nube y sabrá a sol! :)
    ~MArina~

    ResponderEliminar
  2. vale en estos momentos te diría: Te odio!; pero no lo voy a decir ¿por qué? PORQUE A QUIEN ODIO ES A MARINA!
    En serio te juro que tooooooodo lo que tenia pensado comentarte lo ha comentado ella!! esto es muy triiiiste, ahora? que comento yo? es que hasta el cacho del capitulo nos ha gustado el mismo!!
    -Vale… Pero no te enfades.
    -¿Con quién?
    -Contigo… Por favor.
    esto es muuuuy fuerte ya eeeh? jajajajaja
    decirte que lo del reflejo me ha dejado anonadada!! jajaja ¿qué pasa que cuando tiene reflejo es cuando es malo? Realmente me da un poco de miedito.. parece que está poseido y si supierais como me lo imagino cuando empieza diciendo lo de "¡Laia! ¿Dónde estás? Sé que estás ahí… Venga sal, que estoy bien." jajaja seguro que os meais... jajajaja
    bueno visto lo visto.. que cierta persona me roba los comentarios.. solo me queda decirte que: ¡SUBE NUEVO CAPITULO YAAAAAAAAA! jajajaja
    que siempre nos dejas con la intriguilla ¬¬


    Loveyaaababiee!

    ResponderEliminar